3 formas científicamente validadas de despejar tu mente.

Todos hemos vivido esos momentos en los que nos sentimos infoxicados, bloqueados y distraídos, saber cómo podemos aclarar nuestra mente para podernos enfocar es muy importante tanto para nuestra productividad como para nuestra salud mental.

Varios lectores me han escrito pidiéndome que les comparta recomendaciones para lograr salir de la confusión mental y ordenar sus mentes y por eso elegimos este tema para de la semana, cuando tengas una necesidad en especial tu tambien me puedes escribir recomendando temas que te gustaría conocer en este tu espacio.

Hoy a lo Marie Kondo, revisaremos qué podemos hacer con nuestra mente para que tenga más orden, claridad y calidad en los pensamientos que nos presenta. Muchas personas han intentado aplicar diferentes técnicas en búsqueda de esa sensación de paz mental que sentimos cuando estamos en atención plena. 

Ordenar tu mente no es algo tan fácil como limpiar tu escritorio o tu bandeja de entrada en la que simplemente es cuestión de clasificar y eliminar información. tu programación mental proyecta un aproximado de 90.000 pensamientos por día y en su mayoría estos son negativos, anticipamos escenarios peligrosos y detonamos la ansiedad, recordamos errores y activamos el miedo o entramos en rumiación y nos paralizamos ante la incertidumbre.

Para aprender a aclarar nuestra mente es importante aplicar de manera frecuente micropasos que nos ayuden a generar nuevas redes neuronales que nos conduzcan a la calma y la concentración en especial cuando las aplicas en combinación. Recuerda que la clave para lograrlo es probar todos los neurotips y elegir aquellos con los que te sientas mejor:

  1. Sal a exterior: da un paseo, mira por la ventana, siéntate al aire libre, pero saca tu cabeza de la pantalla por unos minutos y veras como de manera natural tu mente comienza a reducir la velocidad y encontrar soluciones a problemas que no habías lograr resolver.
  2. Respira de manera consciente: si, ya te lo he dicho en muchas otras entradas pero aprender a respirar es muy efectivo tanto para la salud mental como emocional. Para, quédate quieto y toma algunas respiraciones profundas y lentas por la nariz y durante unos minutos, solo disfruta del aire entrando y saliendo de tu cuerpo y si es posible identifica el momento en el que haces el cambio entre inhalar y exhalar. (algunas personas llaman a este ejercicio respiración mindfulness o meditación, pero no te asustes, tu solo vas a respirar) y si llegan pensamientos que te distraigan déjalos pasar, tu tarea es observar la respiración, no lo olvides.
  3. Haz un vaciado mental: no te puedes enfocar en la tarea que tienes enfrente con cien cosas haciendo ruido en tu mente; sacarlas de allí y colocarlas en un papel que revisas después es la magia de la concentración. tu mente no es una caja para guardar cosas es el procesador más sofisticado del universo.

y un neurotip extra es realizar todas las acciones anteriores más lento de lo que normalmente vives, cuando bajas la velocidad externa también lo haces en tu mente y esto te permite tener mayor perspectiva y claridad.

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